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El milagro de los Chipolopolo

El milagro de los Chipolopolo
Fotografía de la Selección de Fútbol de Zambia en el año 1993
Fotografía de la Selección de Fútbol de Zambia en el año 1993

José Naranjo

«Cuando viajas tu mirada termina cambiando»
Fotografía de la Selección de Fútbol de Zambia en el año 1993
Fotografía de la Selección de Fútbol de Zambia en el año 1993

A comienzos de los años noventa, la selección de fútbol de Zambia, conocida como Los Chipolopolo (los balas de cobre), desplegaba un fútbol deslumbrante. Liderada por el jugador del PSV Eindhoven Kalusha Bwalya, había logrado llegar a cuartos de final en los Juegos Olímpicos de Seúl de 1988 destrozando a Italia (4-0) en un épico partido y era una de las favoritas africanas para ir al Mundial de Estados Unidos 1994.

Sin embargo, el 28 de abril de 1993, cuando volaban hacia Dakar para disputar una eliminatoria de la Copa África, el avión en el que viajaban sufrió el incendio de un motor y se precipitó en el mar, frente a las costas de Gabón, envuelto en llamas. No hubo supervivientes,  murieron todos los jugadores y el cuadro técnico al completo.

Sólo tres miembros del equipo que jugaban en Europa y habían sido autorizados a jugar con sus clubes aquel día lograron burlar a la muerte, el propio Bwalya, Musonda (Anderlecht) y Johnson Bwalya (Bulle). A partir de ellos se construyó a toda prisa un nuevo equipo. No lograron clasificarse para el Mundial de EE.UU., pero lograron un espectacular resultado en la Copa África de 1994 celebrada en Túnez, llegando a una final en la que cayeron derrotados ante la entonces todopoderosa Nigeria (2-1). En 1996, alcanzaron las semifinales. Luego, Zambia casi desapareció de la escena internacional.

Hoy, dieciséis años después, Los Chipolopolo están de nuevo en una semifinal de la Copa África. Y lo están por méritos propios. Cuatro partidos, tres victorias y un empate. Les toca medirse a Ghana y no parten como favoritos, pero esta selección a las órdenes del francés Hervé Renard y sin estrellas de relumbrón, ha mantenido un óptimo nivel de juego durante todo el torneo y quizás no haya dicho su última palabra.

Enfrente estará Ghana, que logró clasificarse para cuartos de final con algún apuro y que sufrió más de lo esperado en cuartos de final para deshacerse de Túnez. Hubo que esperar hasta la prórroga para que un gol de André Ayew (Olympique de Marsella) condujera a las Estrellas Negras hasta las semifinales. El equipo que hizo soñar a toda África en el Mundial de Sudáfrica 2010 quiere hacer historia en este torneo.

En la otra semifinal, una solvente Costa de Marfil con un entonado Didier Drogba al frente se verá las caras frente a Mali, que también sufrió para deshacerse de la anfitriona Gabón. Todos los pronósticos conceden ventaja a los marfileños, pero ya se sabe que los milagros también existen. El próximo miércoles, 8 de febrero, se juegan los dos partidos.


Resumen del partido Zambia – Sudán (3-0)

José Naranjo es un periodista grancanario que ha dedicado buena parte de su carrera profesional al continente africano. Autor de dos libros sobre inmigración, Premio Derechos Humanos 2007 del CGAE, en la actualidad vive en Dakar (Senegal) desde donde colabora con distintos medios de comunicación. Es cofundador del portal GuinGuinBali, dedicado a la actualidad africana.

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Un comentario

  1. Debería ganar Costa de Marfil 😉 Simplemente por tener entrenador marfileño. No sé si era el único entrenador africano de la CAN, pero eso de tener entrenador francés o europeo, para mí, revela algo de complejo. Leí un comentario en twitter preguntando si Zahui cobra lo mismo que cobró Eriksson o los entrenadores previos de los elefantes, directos desde las ligas europeas. Debería y los africanos deberían confiar mucho más en sus técnicos y su gente …

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